Close

Jamie Lee Curtis: Libreto y guion de una dama de Hollywood

Por Steven Goldman

diciembre 2019

Lo mejor de sentarme a conversar con Jamie Lee Curtis es tener la oportunidad de disfrutar de su contagiosa pasión. Curtis es una fuerza de la naturaleza y una reconocida estrella de Hollywood a la vez; abierta y cautivadora, nunca se ha visto envuelta en polémicas, a pesar de que ha estado en el “show business” lo suficiente como para apreciar la innegable seducción, genuina bendición y naturaleza efímera de este rubro/género. Conoció el éxito con su primera película, “Halloween”, en 1978. Desde entonces ha repetido el rol de Laurie Strode cuatro veces, más recientemente en el 2018, con una secuela que recaudó alrededor de 255 millones de dólares en entradas. Pero aún hay más, mucho más.
jamie-lee-curtis-libreto-y-guion-de-una-dama-de-hollywood5de929629f70c

Algunas cosas que quizás no sabemos de Curtis es que es autora de libros infantiles, o que fue una especie de “madrina” actoral para Jake Gyllenhaal. También ha sido protagonista en películas éxito en taquilla como “Trading Places”, “True Lies” (por la que ganó un Globo de Oro), “Freaky Friday”, “My Girl”, y en la icónica comedia de finales de los 80 “A Fish Called Wanda”.

¿Qué nos trajo nuevamente a querer hablar con esta leyenda viviente de Hollywood? “Entre navajas y secretos”, su más reciente estreno cinematográfico, que mezcla misterio y comedia, y que ha sido aclamada por la crítica a nivel mundial, tras su paso por el circuito de los más afamados festivales de cine. 

En “Entre navajas y secretos” la actriz interpreta a Linda Drysdale, parte de un codicioso clan familiar ―el que integra junto a Chris Evans, Michael Shannon, Toni Collette y Don Johnson― cuyos planes de dividir la fortuna de su recientemente fallecido patriarca (Christopher Plummer) son interrumpidos por un estrafalario detective sureño interpretado por Daniel Craig, quien ve con sospecha las circunstancias que rodean la muerte del anciano. Sobre este nuevo rol, Curtis conversó en exclusiva con Revista Sarah.

Eres una verdadera “Dama del Cine”, ¿qué tienen los rodajes que te emocionan tanto y te hacen volver y volver a un set para grabar siempre un nuevo éxito?

¡Es una increíble pregunta! Nunca pensé que podría hacer películas y sigo sin creerlo. Nada de esto fue planeado, simplemente llegué aquí. Soy el tipo de persona que agradece lo que llega, lo hago parte de mi vida, aun cuando no estoy esperándolo. De verdad no hay mucha planificación, solo es el universo que le entrega cosas asombrosas a mi vida.

¿Cómo llega la invitación a integrarte a Entre navajas y secretos?

Estaba en una conferencia con mi marido (Christopher Guest) cuando mi manager me llamó y dijo “tienes que leer este proyecto”. Justamente estaba en un momento en que intentaba pasar más tiempo con mi familia, pero él insistió. Así que desperté un día a las cuatrode la mañana y leí el guión mientras mi marido dormía a mi lado y simplemente no podía creerlo, quedé maravillada con lo que leí.

¿Qué es lo que no podías creer?

Que en ese momento me estuvieran invitando a sumarme a un equipo de gente tan diverso y tan graciosos, y pasar dos meses en Boston haciendo esta película.

¿Qué tuvo en particular que te llamó la atención? 

Honestamente no había trabajado desde “Halloween”. Fue a principios de octubre del año pasado y le había hecho mucha promoción a esa película. Sabía que a la gente le había gustado, por lo que estaba muy emocionada, pero esta película fue un cambio perfecto. Se presentó esta oportunidad y decidí formar parte de este equipo increíble y talentoso. Una vez más, de forma totalmente inesperada.

El film “Halloween” y todas sus secuelas forman parte de tu vida, ¿cuán importante es “Halloween” para ti, y cuán importante es poder salir de esa “caja”?

No es una caja, a decir verdad. Es una parte, y es la razón por la que tengo una carrera. Creo que no tendría una carrera si no fuera por “Halloween”. Me dio la oportunidad de “saltar a la fama” cuando era muy joven. Creo que el éxito está dado por el papel, la propia película, y la forma en que fue hecha; desde mi perspectiva tuvo que ver muy poco conmigo. Al hacerla tuve mucha suerte, así que no es algo de lo que quiera desligarme. El único problema es que nací y me crié alrededor de este éxito temprano, y entiendo que la gente te encasilla con eso, pero sabía que en algún momento haría algo diferente y así fue.

El terror forma parte de tu vida…

Sí, pero cuando tenía 21 o 22 años decidí alejarme del terror, y dentro de una semana estaba interpretando a Dorothy Stratten en una película para TV, un drama sobre su vida y muerte. Y un mes después de eso estaba dentro del elenco de “Trading Places”, y esa película me cambió la vida. Y luego “A Fish Called Wanda” también me cambió la vida, y entonces “True Lies” la volvió a cambiar. Si no me hubiese desligado de las películas de terror en ese punto, no tendría el espectro más amplio de trabajo que he conseguido. Y después de todo eso, volver al inicio, al género de terror, tuvo completo sentido.

Cuéntanos de tu personaje en “Entre navajas y tijeras”, la agente inmobiliaria Linda Drysdale…

Me identifico mucho con su necesidad de demostrar que lo hizo todo ella sola, porque yo también tuve la misma necesidad desde los comienzos de mi carrera. No importaba mucho el trabajo que hacía, el ser hija de padres reconocidos, si bien tuvo un impacto en mi vida, hacía que las personas trataran de colgarse de eso para quitarme todo el respeto que generaba por mi trabajo diciendo: “Bueno, la razón por la que tienes esta oportunidad es porque eres hija de gente famosa”. 

¿Te afectaba mucho?

Era muy sensible con ese tema, y creo que este personaje tiene una historia muy similar. Creo que Linda estaría a la defensiva si le dicen que la razón por la que es exitosa es porque su padre le dio el dinero. Está muy orgullosa de su ética de trabajo, como yo de la mía. Siento que fui capaz de mostrar la división entre el supuesto beneficio de ser la “hija de” y el verdadero trabajo de ser esa persona. Pude incorporar eso en Linda, fue muy claro para mí. Sabía quién era.

Fotografías: Amanda Freidmand