La mansión que alguna vez representó el gran renacer de la historia de amor entre Ben Affleck y Jennifer Lopez hoy se convierte en el símbolo más visible de su separación. La pareja, que retomó su romance tras dos décadas de distancia y celebró dos bodas en 2022, compró la propiedad en mayo de 2023 por 60,8 millones de dólares. Sin embargo, poco más de un año después, el sueño compartido en Beverly Hills se ha transformado en una pesada carga emocional para el actor.
La residencia, conocida como “Crestview Manor”, se alza sobre 20.234 mt2 de terreno y cuenta con más de 3.500 metros cuadrados de superficie construida. Doce habitaciones, veinticuatro baños, una piscina tipo infinity, gimnasio de alto nivel, cine privado, casa de huéspedes, garita de seguridad y espacio para estacionar hasta 80 vehículos: todo en esta mansión fue pensado para reflejar una vida de pareja consolidada y rodeada de lujo. Incluso se construyó un centro deportivo interior con cancha de baloncesto, pickleball, un ring de boxeo y un bar exclusivo.
Pero las apariencias no duraron. Tras semanas de especulaciones, Affleck y Lopez oficializaron la venta de la propiedad, ahora en el mercado por 68 millones de dólares. La cifra supera en más de 7 millones lo que ellos pagaron hace poco más de un año, lo que podría explicarse por las recientes remodelaciones de lujo. No obstante, en la práctica, el proceso ha sido todo menos rentable.
Según medios estadounidenses, ambos habrían intentado vender la casa de forma privada sin éxito, incluso rechazando una oferta cercana a los 59,5 millones. Hoy, el actor estaría dispuesto a asumir una pérdida millonaria con tal de cerrar definitivamente ese capítulo de su vida.
Fuentes cercanas al intérprete de Batman aseguran que la decisión responde más a una necesidad emocional que económica. “Para Ben, perder un par de millones es un precio insignificante por recuperar su tranquilidad”, revelaron. Ya instalado en una casa de alquiler en Brentwood, Affleck busca dar vuelta la página, dejando atrás los recuerdos que aún habitan en esa mansión.Mientras tanto, Jennifer Lopez continúa enfocada en sus proyectos personales, aunque también habría sido vista buscando una nueva propiedad en Los Ángeles. Así, el lujoso hogar que una vez albergó risas, promesas y una segunda oportunidad en el amor, ahora se ofrece como un palacio vacío. Un escenario sin protagonistas, que marca el punto final de una de las historias más mediáticas de Hollywood. #SARAH