La actriz Teresita Reyes, reconocida por su extensa trayectoria en televisión, teatro y cine, se encuentra enfrentando uno de los desafíos más complejos de su vida: un diagnóstico doble de cáncer, primero mandibular y luego estomacal.
Durante las últimas horas, se dio a conocer que Reyes, de 75 años, se encuentra hospitalizada en la Clínica Santa María, donde actualmente está siendo estabilizada tras sufrir complicaciones durante su tratamiento oncológico.
Fue su familia quien informó sobre su situación a través de un comunicado oficial publicado en su cuenta de Instagram. En el mensaje, señalaron que durante el proceso de quimioterapia han surgido afecciones que han comprometido tanto su corazón como sus riñones, lo que llevó a los médicos a mantenerla internada y bajo constante monitoreo.
“En este momento, los médicos están haciendo todo lo necesario para estabilizarla completamente y poder determinar con claridad el origen de estos problemas”, señalaron.
Días antes de que su estado de salud se agravara, la propia actriz compartió un mensaje en sus redes sociales, demostrando su habitual franqueza y fortaleza: “Con la verdad y el corazón abierto, lamentablemente, el cáncer volvió. Pero no pienso dejar que me gane”, escribió, agregando que iniciaba la quimioterapia en la Fundación Arturo López Pérez (FALP), agradeciendo del equipo médico que la acompaña.
Hoy, su círculo más cercano acompaña de forma permanente a la actriz, destacando su temple y su voluntad inquebrantable. “Teresita lo siente, lo valora y sigue enfrentando este proceso con entereza”, concluyeron en el comunicado.
Por ahora, la familia ha decidido comunicar cualquier novedad sobre su estado de salud exclusivamente a través de estos comunicados oficiales, mientras esperan que su situación se estabilice y pueda retomar su tratamiento con la fuerza que siempre la ha caracterizado.
HISTORIAL CLÍNICO DE TERESITA REYES
Recordemos que la actriz había sido intervenida quirúrgicamente hace algunas semanas debido a un cáncer mandibular que, según palabras de su hija, fue un diagnóstico sorpresivo, ya que no presentaba los factores de riesgo comunes como el tabaquismo o el consumo de alcohol.
Durante los exámenes posteriores a la cirugía, se descubrió un segundo tumor, esta vez en el estómago, específicamente en la zona donde se le había realizado una manga gástrica años atrás. Afortunadamente, este segundo tumor fue detectado en etapa inicial, pero también requerirá tratamiento quirúrgico. #SARAH