En un exclusivo encuentro con Vanity Fair, el novio de internet, Pedro Pascal ofreció una entrevista en profundidad en la que compartió detalles sobre su vida personal, su carrera y algunas reflexiones sobre su paso por Hollywood.

La entrevista, realizada en un restaurante de Notting Hill, duró cerca de dos horas, en las que Pascal fue abierto y sincero, abordando tanto sus logros como las dificultades que ha enfrentado en su trayectoria.

El actor comenzó relatando cómo celebró su 50 cumpleaños. Dijo que lo había afrontado con algo de irritación y miedo, reconociendo que la edad le hizo verse más vulnerable. Mencionó que cuando cumplió 40 años, sintió una sensación de fortaleza y adultez, pero que acercarse a los 50 le generó una sensación distinta, similar a un “estado de vulnerabilidad” que no esperaba. 

Confesó que la celebración de su cumpleaños consistió en una reunión íntima con su familia en un restaurante de Londres, donde su hermana le organizó una presentación con fotos familiares y la canción “Corazón de Melón”. Relató que, pese a su reacción emocional, intentó no mostrar demasiado y agradeció a su hermana por el gesto.

UN REPASO POR EL PASADO

Durante la charla, Pascal también detalló su infancia, originaria de Chile, donde su madre – María Verónica Pascal Ureta- fue una refugiada política y emigró a Estados Unidos con él y sus hermanos tras la dictadura de Pinochet. 

Durante la entrevista, recordó el momento en que su madre murió cuando él era joven, por suicidio, un hecho que calificó como una herida que todavía lleva con él. 

Dijo que esa experiencia le enseñó a aceptar su vulnerabilidad y a ser honesto respecto a sus emociones. También compartió que, tras la pérdida de su madre, viajó varias veces a Chile y que siempre recuerda las películas en HBO que su madre le ponía cuando era pequeño, que le generaron una pasión por el cine.

Emocionado y relatando entre lágrimas, agregó que el recuerdo de su madre está siempre presente junto a él: “Sentí que mi madre estaba conmigo cuando animé Saturday Night Live por primera vez. No sé qué más decir. Fue una transformación completa del aniversario de un duelo”. 

Lo anterior, debido a que durante su debut como anfitrión en el conocido programa estadounidense, coincidió con el aniversario número 24 de la muerte de su madre. 

En cuanto a su carrera, Pascal explicó que en sus primeros años en Hollywood enfrentó mucha resistencia y críticas, especialmente en los comienzos, cuando le decían que era “demasiado viejo” o que “no encajaba” en ciertos roles. Sin embargo, afirmó que siempre trató de mantenerse fiel a sí mismo, intentando proyectar autenticidad. 

Asimismo, ahondó en la historia de su perrita Gretta, una mezcla de pitbull, que fue rescatada y lo acompañó durante 12 años, falleciendo justamente después de grabar en “Game Of Thrones”.

“Pienso en lo pobre que era cuando tuve a Gretta. Pienso en cuando tenía turnos dobles y no encontraba a nadie que la sacara y vivíamos en un apartamento de mala muerte en Red Hook (Brooklyn), y pienso en la vida de lujo que llevaría conmigo ahora, en lugar de entonces, y me duele, de verdad“, comentó entre lágrimas.

PEDRO, UN ÍCONO DE LA MASCULINIDAD MODERNA

Comentó que su papel en “The Last of Us” le permitió explorar un personaje más emocional y frágil, lo que generó debates sobre la representación de masculinidad en la actualidad. Dijo que, aunque algunos sectores criticaron que su personaje mostraba vulnerabilidad, para él esa cualidad es la verdadera manera de fortalecer a los personajes masculinos.

También abordó las polémicas en torno a su figura pública, sobre todo las opiniones divididas respecto a su imagen y su proyección como ícono de la masculinidad moderna. Aclaró que no le interesa encajar en moldes tradicionales, sino que busca ser auténtico y honesto con su forma de ser. Comentó que, en varias ocasiones, ha recibido críticas por declaraciones relacionadas con temas sociales o su estilo personal, pero que siempre intenta actuar desde la sinceridad.

Respecto a su vida personal, mencionó que celebra la vida y valora las pequeñas cosas: las amistades, la familia, y sus mascotas. Reveló que fue una ayuda mutua con amigos lo que le permitió salir adelante en momentos difíciles, especialmente tras la muerte de su madre y durante su etapa de esfuerzo en la industria del entretenimiento. Dijo que aún tiene miedo al rechazo, pero que ha aprendido a aceptarse a sí mismo con todas sus heridas.

Finalmente, Pascal compartió sus aspiraciones: quiere seguir actuando con honestidad, sin temor a mostrar su vulnerabilidad y sin preocuparse demasiado por la fama. Comentó que su objetivo es que su trabajo sirva para abrir debates sobre la masculinidad, la vulnerabilidad y la aceptación personal. 

«No quiero ser solo un ícono, sino un ejemplo de que ser auténtico es lo que realmente importa«, concluyó. #SARAH