‘Superfine: Tailoring black style’ es el tema de la actual muestra de indumentaria del Museo de Arte Metropolitano de Nueva York, cuya noche inaugural es la famosa MET gala, la cual detrás de toda la frivolidad aparente es un evento para juntar dinero para el mismo museo y así prolongar y mejorar su financiamiento. Pero esta frase en inglés que define el tema de la muestra, y que podríamos traducir como: ‘superperfecto: la sastrería (o lo hecho a medida) en el estilo negro’ que nos podría parecer muy ajena en el fondo tiene mucho más que ver con nosotros, amantes de la moda aquí en Chile, de lo que podríamos creer a simple vista.
La comunidad negra llegó a occidente desde África como objetos para comerciar, no como humanos. Desde este punto de deshumanización y a través de siglos de lucha y reivindicaciones han logrado transformarse en quienes dictan muchas de las modas que hoy todos seguimos alrededor del mundo. ¿Pero cómo un grupo de personas de no tener nada, ni siquiera libertad de acción, pueden transformarse en esto? Pues gracias a que nunca quisieron ser algo que no son.
El código de vestimenta de la gala de anoche es ‘tailored for you’, o sea ‘hecho a medida para ti’ y esto va más allá de lo obvio que es un prenda hecha a medida, si no que apela también a tener ideas hechas a medida a nuestros contextos, nuestros tipos de cuerpo, a nuestros colores, a nuestros gustos, a nuestra realidad económica y no a la del otro. Al ser personas libres la comunidad negra pudo al fin comenzar a ser ellos consumidores de indumentaria, pero por supuesto ellos no iban a querer verse como sus ex dueños, todo lo contrario. Ellos tenían que hacer un real ‘hecho a medida’ de la indumentaria que existía en su contexto.
Si bien eran libres, el contexto no era amable. Las comunidades blancas seguían siendo muy racistas, viéndolos como humanos no tan humanos como ellos, siendo económicamente más estables y poderosos que ellos. Pero no hay nada que dispare más la creatividad que la vulnerabilidad social y la escasez económica. Y en esa hostilidad, el vestir, y vestir bien pasó a ser un acto político, un declaración de dignidad, de humanidad, de libertad y de identidad. Pues jamás tendrían los materiales o presupuestos de los blancos, pero el look final siempre fue impecable y por lo mismo muy propio. Esta creatividad lleva a su cúspide en los 30s del siglo pasado con el ‘zoot suit’, el epítome del dandy negro y que también adoptó la comunidad latina y cuyo máximo exponente fue Cab Calloway. Y podemos pensar que ya a estas alturas la tensión racial era menor, pero a ciertas comunidades les molestaba lo estridente de los zoot suit en los estados al sur de EEUU y lamentablemente la violencia estalló, solo por el vestir de algunos en los ‘zoot suit riots’ en 1943, donde a dandis negros y latinos se les atacó físicamente por su vestir.
A pesar de esta violencia no tan lejana, el estilo permaneció y hoy el resto es historia, desde el jazz, el hip-hop, el reggaetón y cuanto estilo musical se ha hecho famoso, el ‘black style’ siempre está presente. Podemos verlo incluso hoy, los domingos por la mañana cuando vemos a familias de inmigrantes haitianos yendo a la iglesia en sus mejores pintas, cuando nosotros aun estamos despertándonos en pijama después de un sábado de carrete. Siempre muy elegante, y muy en sus códigos.
Y eso es lo que siento podemos aprender de esta MET gala. Nosotros como chilenos, sudacas, tercermundistas siempre vamos a ser vistos como menos respecto a alguien del primer mundo. Pero aún así tratamos de imitar sus modas y tendencias, aunque no tenemos ni la misma fisionomía, poder económico o contexto. Quizá sea hora de dejar de ser esclavos de las tendencias de moda de personas que nos son totalmente ajenas y piensan que vivimos de apagón en apagón, y empezar, como hicieron las comunidades negras cuando pudieron, a escribir nuestro propio relato, nuestras propias tendencias y estéticas, basadas en nuestra identidad, contexto y posibilidades socioeconómicas. Me imagino que el mundo ha avanzado suficiente para que no se repita un ‘zoot suit riot’ que somos libres de vestirnos como queramos. Creemos una moda y un vestir ‘tailored for us’, una moda y un vestir ‘hechos a nuestra medida’, pero no solo nuestras medidas físicas, a medida de nuestros gustos, pasiones, sueños y fantasías, no de las de otros.